Electronic Arts (EA) ha anunciado que cerrará los servidores de tres de sus juegos este año, lo que plantea nuevamente la cuestión de la propiedad de los juegos que compramos. Los juegos afectados por esta decisión son Crysis 3, Dead Space 2 y Dante’s Inferno, que perderán sus componentes multijugador y en línea hacia finales de este año.
EA ha facilitado esta información a través de su sitio web, donde los jugadores pueden consultar las fechas y plataformas en las que los servidores de estos juegos dejarán de estar disponibles. Aunque la compañía aún no ha hecho un anuncio formal en sus redes sociales, los títulos en cuestión ya figuran en la lista de cierres con las fechas establecidas.
Todo sobre los juegos que Electronics Arts cerrará
El primero en verse afectado será Crysis 3, título desarrollado por Crytek. A partir del 7 de septiembre, los servidores de este juego dejarán de funcionar en PlayStation 3, Xbox 360, Xbox One y PC. Los modos competitivos en línea ya no estarán disponibles, excepto en la versión remasterizada de Crysis 3, donde dichos modos no se verán afectados por el cierre.
Dante’s Inferno y Dead Space 2 serán los siguientes en cerrar sus servidores el 8 de diciembre. A partir de esta fecha, el modo cooperativo de Dante’s Inferno y la vertiente Outbreak de Dead Space 2 ya no estarán disponibles en ninguna plataforma. Además, se ha anunciado que el 30 de octubre se cerrarán los servicios en línea del juego móvil Restaurant Dash: Gordon Ramsey.
Aunque es común que los servidores de juegos antiguos se cierren debido a la disminución del tráfico de jugadores, siempre resulta desalentador para los fans descubrir que partes fundamentales de un juego dejarán de estar disponibles. En el transcurso del año, EA también cerró los componentes en línea de tres juegos de Medal of Honor y retiró del mercado tres títulos retro de la franquicia Battlefield.
Este anuncio vuelve a poner en el centro del debate la cuestión de la propiedad de los juegos digitales, ya que los jugadores se preguntan si realmente son dueños de un juego que adquieren si la compañía puede decidir cerrar los servidores y desactivar partes esenciales de la experiencia de juego.