El filántropo y uno de los genios más destacados de nuestro tiempo, Bill Gates, ha venido perdiendo posicionamiento en el top de billonarios. En los últimos tiempos, al creador de Microsoft se le sumaron Jeff Bezos, de Amazon, y Elon Musk, con Tesla y SpaceX. Todo parece indicar que estamos ante la retirada de Gates de los sitiales de privilegio. El propio involucrado comentó el porqué dejará estos sitios luego de muchos años en los primeros puestos.
No hace muchas semanas el primer lugar de esta lista, donde pelean los principales magnates tecnológicos, quedó para Musk. El excéntrico millonario aprovechó, además de un buen momento de sus empresas, la volatilidad de la bolsa de valores. Últimamente, Bill Gates ha ido perdiendo su sitial privilegiado ante sus colegas más jóvenes. El cofundador de Microsoft, que revolucionó el mundo con Windows, habló sobre el tema en Twitter.
Twitter informativo de Bill Gates
Durante el hilo que presentó Gates en la red social Twitter explica la transferencia de 20.000 millones de dólares a su fundación. De esta manera se aumentará, para 2026, el gasto en 9.000 millones de dólares anuales. La explicación del magnate tecnológico se centró en los contratiempos actuales. Allí se enumeró la pandemia, la invasión rusa a Ucrania, y otros tantos factores.
Gates planteó que “de cara al futuro, tengo previsto donar prácticamente todo mi patrimonio a la fundación”. Esta situación lo hará caer en la lista de millonarios y él mismo lo reconoció al plantear que “saldré de la lista de las personas más ricas del mundo”.
El filántropo agradeció a Warren Buffett, su famoso inversor, y Melinda Gates, su exesposa. Al primero por su larga contribución con la Fundación Bill y Melinda Gates, y a la segunda por su “increíble generosidad”.
Warren Buffet, Melinda Gates y Bill Gates fundaron, en 2010, una iniciativa denominada “The Giving Pledge” (el compromiso de dar). Este movimiento reunía filántropos donando para causas benéficas, tanto en vida como en sus testamentos. Bill Gates no heredará a sus hijos, sino que apuntará a dejar su patrimonio –que actualmente ronda los 114.000 millones de dólares– para causas globales como el cambio climático.